lunes, 14 de marzo de 2011

Donde el tsunami nos empuja

No me quiero unir a ese grupo de unir a ese grupo de catastrofistas que predicen el fin del mundo, y pandemias, y enfermedad, y explosiones, y la presidencia de Belen Esteban. Soy de las que piensa que otra realidad, mas justa y con una vision mas positiva del futuro es posible.

Los ultimos hechos acontecidos en Japon me ponen los pelos de punta. Gracias a Internet he tenido acceso a comentarios de muy diversa indole, de expertos trolls, o de diplomados en fisica por la Universidad a Distancia de Google. La realidad es que la unica energia que conozco es la que me hace sentir verdadero panico al ponerme en la piel de esa gente, de toda una nacion prospera y serena, con una cultura hermosa que se ha ido oscureciendo en un torbellino de consumo, de maquinas de colores y de niñas con pelucas.

A donde puede llegar el homo capitalensis en su canibalismo, en su ansia de poder, en su continua masturbacion por alcanzar un limite situado en el fango espumoso de la corrupcion?

Pobre generacion de niños perdidos, cuya hambre solo sacia la mas exquisita de las hamburguesas, incompletos sin una marca conocida impresa en la camisa, inseguros sin una mascara de maquillaje. No tenemos metas, no conocemos el valor, estamos agarrados a una espiral de consumo, ocultando nuestra falta absoluta de esperanza tras el traje de seguridad y valor que nos da el ser personas capaces de tener un trabajo y sacarnos las castañas del fuego. Manteniendo este sistema hipocrita que solo da de comer a unos gansos, a unos puercos engordados con carne humana.

Sabemos que no necesitamos tanto. No nos da miedo la gente que ha perdido todo en Japon, nos da miedo que el sistema quiebre, nos da miedo la inseguridad, el fin de esta epoca dorada que toca a su fin.

Quiero mirar con ilusion y pensar que solo llega a su fin la mierda dorada. Quiero pensar que cuando nos demos cuenta de este engañabobos de aparatos hechos para romperse, de pagar etiquetas, de fruta regada con sangre; encontraremos un nuevo camino en el que nos encontraremos de nuevo buscando una respuesta, abriremos los ojos en este frenesi de bienestar y no aceptaremos mas manipulacion, ni mas mentiras. Aceptaremos la autentica vida, la vida que hay bajo este telon impuesto. Pero solo con nuestro grito podremos pararlo, solo nosotros somos dueños de la decision. Solo nosotros podemos salir de Matrix.

No hay comentarios:

Publicar un comentario